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SOBRE NOSOTROS
Hola, mi nombre es Isabel Bonilla, tengo 3 hijos, uno de 24, 22, 10 y un bebe de 1 año, un chico precioso, llevo trabajando desde los 6 años, sufrà todo tipo de maltrato , muchas veces me pregunté por qué yo? Por qué yo ?
Ahora comprendo que el oro fino pasa por el fuego para ser probado. Quiere decirte, durante mucho tiempo intentamos con mi esposo tener nuestro último hijo querÃa que fuera un niño, en el intento perdà 4 embarazos todavÃa lloro por cada uno de ellos, entendà que el momento es no la nuestra sino la de Dios, un dÃa me desperté con las ganas de hacerme una prueba de embarazo por un sueño que tuve la noche anterior, donde Dios me decÃa al oÃdo, hoy tendrás lo que tanto me pediste con lágrimas en tu ajo, fui al baño y sorpresa, me salió positivo, no podÃa creer, brincar, llorar, reà con alegrÃa agradeciendo tanto a Dios por ese hermoso momento, sentà que el tiempo se detuvo que solo quedaba yo y ese bebé que se estaba sopesando para ser dueño de toda mi vida.
Pasaron los meses, fue una etapa que Disfruta al máximo, ha llegado el momento del parto, el dÃa soñado, Por fin en mis brazos, alguien tan hermoso, pequeño, frágil con ese olor inconfundible y esos membrillos rosados, cuando me vi su cara me di cuenta que algo estaba pasando con mi bebé, respiro y disfruto ese momento con mi hijo, a las 2 horas llegó un especialista y me dio la noticia de que mi bebé venÃa con sÃndrome de Down, en ese momento mis miedos pesaban mis preguntas sobre ¿porque?
Al dÃa siguiente la especialista volvió a decirnos que tenemos que llevarnos a su bebé, porque no come, sus defensas están muy bajas, su temperatura se desequilibró y otras cosas, cuando se fue con mi bebé en brazos pensé que peor, lloré tanto de miedo y le rogué a Dios que me dejara por favor porque lo amaba lo acepté exactamente como él me envió y por alguna razón mi bebé estaba ahà siendo parte de nuestras vidas, Dios nos lo permitió. Nuestro hijo ha cambiado mi forma de ver la vida con su condición me enseñó a ver más.
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Con los ojos del alma, me enseñó que las mamás que tienen bebés como el mÃo pueden hacer más de lo que imaginamos, Mi bebé es la inspiración. de mi Logo de mi tienda y por eso tiene los colores del SÃndrome de Down. Él es mi motivación y vendrán muchas más sorpresas, espero que mi historia sea una luz y esperanza para las mamás que, como yo, tienen hijos con esta condición y las inspire a salir adelante. La vida a veces se cansa, a veces duele, no es perfecto, no es fácil no es justo no es eterno pero sin embargo es muy hermoso y nos da oportunidades para empezar, amar, perdonar y seguir en el camino si Dios camina contigo.
